La Sociedad Española de Inmunología Clínica, Asma y Alergia Pediátrica (SEICAP) recuerda que las picaduras de insectos y sus reacciones alérgicas entre los niños aumentan en verano, y, por lo tanto, es importante extremar las precauciones cuando estén al aire libre. Las abejas y las avispas son las mayores causantes de este tipo de alergias.
“Es preferible evitar lugares con mucha vegetación y aguas estancadas, donde este tipo de insectos son más abundantes, sobre todo al atardecer, que es cuando tienen mayor actividad y, si es posible, no andar descalzos sobre el césped, no realizar comidas en el campo al aire libre y no utilizar ropas de colores llamativos, ni perfumes, para no atraer a los insectos”, indica el doctor Juan Carlos Cerdá, miembro del Grupo de Trabajo de Educación Sanitaria de la Sociedad Española de Inmunología Clínica, Asma y Alergia Pediátrica (SEICAP). Además, advierte de que es importante acudir de inmediato a un pediatra alergólogo en caso de reacción generalizada.
Una de las reacciones alérgicas a picaduras más habituales es al veneno de himenópteros (avispas o abejas), indican desde SEICAP. Aparecen rápidamente, pocos minutos después de la picadura, “y pueden ser de dos tipos: locales y sistémicas o generalizadas”, comenta el doctor Cerdá. Las locales se manifiestan con enrojecimiento, hinchazón y dolor en la zona afectada. “Aunque pueden ser muy intensas, si la inflamación no sobrepasa dos articulaciones, no son peligrosas y lo único que requieren es limpieza de la zona con agua y jabón, se puede aplicar amoniaco y frío local, además de tomar por boca antihistamínicos y corticoides”, añade. A veces estas reacciones locales intensas dependen de una gran sensibilidad de la piel del niño que se llama dermografismo, y no de una reacción alérgica.
Medidas ante una reacción anafiláctica
Mientras, las reacciones sistémicas implican gravedad y síntomas más allá de la zona afectada, con la aparición de urticaria generalizada con habones y mucho picor, con inflamación de los ojos y la boca, estornudos y mucosidad, lagrimeo, dificultad para tragar y respirar, mareos, bajada de tensión y pérdida de conocimiento.
Esto es lo que se conoce como “reacción anafiláctica, que puede ser muy peligrosa para la vida. Si un niño sufre esta reacción hay que administrarle rápidamente adrenalina intramuscular, si se dispone de ella, además de corticoides y antihistamínicos, y se debe acudir de inmediato a Urgencias para su valoración por el equipo médico y completar el tratamiento si fuera necesario”, explica el doctor Cerdá. “Después, debe ser remitido al Servicio de Alergia Pediátrica que le corresponda, para que pueda ser estudiado”, aconseja.
La alergia al veneno de los himenópteros se desarrolla con el tiempo. “Es poco frecuente en los más pequeños, ya que para que ocurra hace falta ser una persona atópica, genéticamente predispuesta, y haber recibido varias picaduras de abeja o avispa para quedar sensibilizado a su veneno”, afirma el doctor Cerdá. Así, una vez sensibilizado, en el siguiente mordisco “es cuando aparecerán los síntomas de la alergia, por lo que es importante estar pendientes de los niños, ya que a veces en ellos una picadura de avispa o abeja puede pasar desapercibida”, asegura. Un estudio reciente publicado en Immunology and Allergy clinics of North America afirma que la alergia al veneno de los himenópteros puede representar hasta el 34% de los casos de anafilaxia.
Según esta Sociedad Española de Inmunología, todos los niños con alergia al veneno de estos insectos deben llevar un botiquín en el que tengan adrenalina autoinyectable en pluma precargada, corticoides orales y antihistamínicos orales. Asimismo, “deben saber autoadministrase la adrenalina si su edad lo permite, y sus padres tienen que estar adiestrados en el manejo de estos dispositivos, así como el personal de campamentos donde el niño pasa gran parte del verano”, añade.
El 3% con riesgo de reacción sistémica
En España, el 3% de la población tiene riesgo de padecer una reacción sistémica por una picadura de este tipo de insectos, según datos de la SEICAP. Por las consecuencias que esto puede tener, ya que puede suponer incluso la muerte, los pediatras alergólogos recomiendan una serie de consejos a tener en cuenta, como: no intentar espantar los insectos con la mano, sacudir ropa y zapatillas antes de ponérselas, el uso de repelentes para la piel cuando se sale a la calle, en especial en sitios con vegetación, no usar cremas ni colonias demasiado perfumadas, vestir ropas poco coloridas y, a ser posible, con manga larga y pantalón largo, y evitar comidas al aire libre.
Existen varias especies de avispas. Entre las más comunes se encuentran “la polistes, que anida en pequeñas colmenas de varios miembros, situadas debajo de las tejas de la vivienda o sitios similares, y son las que se acercan cuando estamos comiendo al aire libre”, afirma el doctor Cerdá. Por otro lado, está la avispa véspula, que anida en nidos individuales de barro, cerca de sitios húmedos, como piscinas y en el campo. “Éstas tienen un aguijón muy afilado al final del abdomen y pueden picar varias veces y seguir viviendo”, comenta. Por su parte, las abejas tienen un aguijón en forma de arpón que se queda clavado en la piel junto con el saco del veneno y parte de los intestinos, por lo que mueren poco después de la picadura. “Es necesario quitar el aguijón de la piel para que no se siga inyectando veneno”, aconseja.
Por otra parte, alrededor del 3% de la población reacciona de forma exagerada frente a la picadura de un mosquito, según datos de SEICAP. “Aunque éstas pueden provocar reacciones muy molestas e irritantes, se pueden tratar con antihistamínicos y no resultan graves, lo que sí puede ocurrir es que el niño se rasque demasiado y acabe extendiendo la infección”, asegura el doctor Cerdá.
Sin embargo, este especialista asegura que la alergia “al veneno, tanto de mosquitos como de hormigas, tábanos y moscas, suele ser excepcional y se encuentran muy pocos casos”.
Recordamos que SALUD A DIARIO es un medio de comunicación que difunde información de carácter general relacionada con distintos ámbitos sociosanitarios, por lo que NO RESPONDEMOS a consultas concretas sobre casos médicos o asistenciales particulares. Las noticias que publicamos no sustituyen a la información, el diagnóstico y/o tratamiento o a las recomendaciones QUE DEBE FACILITAR UN PROFESIONAL SANITARIO ante una situación asistencial determinada.
SALUD A DIARIO se reserva el derecho de no publicar o de suprimir todos aquellos comentarios contrarios a las leyes españolas o que resulten injuriantes, así como los que vulneren el respeto a la dignidad de la persona o sean discriminatorios. No se publicarán datos de contacto privados ni serán aprobados comentarios que contengan 'spam', mensajes publicitarios o enlaces incluidos por el autor con intención comercial.
En cualquier caso, SALUD A DIARIO no se hace responsable de las opiniones vertidas por los usuarios a través de los canales de participación establecidos, y se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso cualquier contenido generado en los espacios de participación que considere fuera de tema o inapropiados para su publicación.
* Campos obligatorios