Según la Sociedad, la formación MIR (Médico Interno Residente) o equivalente legal es "un requisito imprescindible para poder ejercer como tal en toda la Unión Europea", por lo que tachan la medida de "disparatada e inadmisible", ya que "puede tener incidencia en la calidad de la asistencia y supone una falta absoluta de respeto a los derechos legítimos de los pacientes".
Al igual que hiciera hace unos días Socalemfyc, los médicos de Semergen quieren recordar "la obligación del Ministerio de Sanidad y de las Consejerías de velar por la seguridad del paciente y contratar a médicos que no están correctamente formados implica un desprecio al colectivo de especialistas en Medicina de Familia y al sistema de formación postgrado obligatorio que han debido cursar tras un duro período de cuatro años, al acabar la licenciatura, en el que adquieren las competencias propias de la especialidad".
Desde Semergen, coinciden, además, con las recientes manifestaciones de la ministra de Sanidad, María Luisa Carcedo, en las que indicaba que “nuestro Sistema Nacional de Salud requiere la formación de especialistas para la contratación de profesionales médicos, tanto a nivel de Medicina Familiar y Comunitaria como a nivel hospitalario.”
Con todo, la Sociedad pide que haya una rectificación inmediata por parte de la Consejería de Sanidad de Castilla y León, y ofrece su compromiso para colaborar y ayudar en la búsqueda de soluciones a la crítica situación de la Atención Primaria. A pesar de la rotunda oposición de los médicos, la Gerencia Regional de Salud se ha reunido esta mañana en mesa sectorial con los distintos sindicatos para trasladarles la adopción de esta medida extraordinaria.