El cáncer colorrectal supone un importante problema de salud pública en el mundo, ya que es el segundo más frecuente en las mujeres y el tercero en los hombres. En 2018, hubo más de 1,8 millones de casos, y se prevé que su prevalencia aumente debido al crecimiento de la población de edad avanzada, así como la adopción de hábitos y estilos de vida occidentalizados.
De hecho, existen evidencias robustas que han relacionado el desarrollo de este tipo de tumores con el consumo de alimentos como las carnes rojas y procesadas y la ingesta excesiva de bebidas alcohólicas. Sin embargo, además de la calidad de la dieta, hay otros factores de estilo de vida que también podrían desempeñar un papel importante en el desarrollo de enfermedades crónicas como el cáncer.
Con la finalidad de profundizar en esta cuestión, los investigadores del CIBEROBN, en colaboración con otros grupos del estudio PREDIMED, analizaron la asociación entre dos índices de estilo de vida y el riesgo de desarrollar cáncer colorrectal en individuos con alto riesgo cardiovascular.
El primero, denominado Índice WCRF/AICR 2018, evalúa el cumplimiento de siete de las últimas recomendaciones del WCRF/AICR para la prevención del cáncer: 1) mantener un peso saludable; 2) realizar actividad física; 3) seguir una dieta rica en alimentos integrales, verduras, frutas y legumbres; 4) limitar el consumo de comida rápida y otros alimentos procesados ricos en grasas y azúcares; 5) restringir el consumo de carnes rojas y procesadas; 6) reducir la ingesta de bebidas azucaradas; y 7) limitar el consumo de alcohol.
El segundo índice, propuesto por investigadores de la Universidad de Harvard (EE UU) en 2018, se denomina Índice de Estilo de Vida de Bajo Riesgo, y sirvió de herramienta para medir el seguimiento de cinco factores de estilo de vida saludables: 1) no fumar; 2) no ingerir alcohol; 3) realizar actividad física regularmente; 4) mantener un índice de masa corporal adecuado y 5) seguir una dieta saludable.
Más de 7.000 participantes
Después de analizar datos de 7.216 participantes de entre 55 y 80 años que fueron estudiados durante seis años, se observó que aquellos individuos que presentaban una mayor adherencia a las recomendaciones específicas para la prevención del cáncer (seguimiento de al menos cinco de las siete recomendaciones consideradas), presentaban un 48% menos riesgo de desarrollar cáncer colorrectal en comparación con aquellos que siguieron menos.
Por otro lado, de todas las recomendaciones de prevención, la que mostró una mayor asociación con el riesgo de cáncer colorrectal fue el consumo de bebidas azucaradas. Así, se observó que aquellos participantes con un mayor consumo de estas bebidas (más de 250 ml/día, equivalente a más de un vaso al día) mostraban un 58% más riesgo de desarrollar cáncer colorrectal en comparación con los que no las consumían.
También se observó que una mayor adhesión a un estilo de vida saludable, valorado mediante el índice de estilo de vida de bajo riesgo (cumplir con más de tres de las cinco recomendaciones), se asociaba con un 52% menos riesgo de desarrollar esta enfermedad.
Referencia:
Barrubés, L.; Babio, N.; Hernández-Alonso, P.; Toledo, E.; Ramírez Sabio, J.B.; Estruch, R.; Ros, E.; Fitó, M.; Alonso-Gómez, A.M.; Fiol, M.; Lapetra, J.; Serra-Majem, L.; Pintó, X.; Ruiz-Canela, M.; Corella, D.; Castañer, O.; Macías- González, M.; Salas-Salvadó, J. 'Association between the 2018 WCRF/AICR and the Low-Risk Lifestyle Scores with Colorectal Cancer Risk in the Predimed Study'. J. Clin. Med. 2020, 9(4), 1215.