En los medios (de comunicación), y sobre algunos medicamentos, constantemente surgen reveladoras noticias que aseguran estar avaladas por universidades de las más variopintas procedencias, pero si se indaga un poco aparecen otros lugares de esos "contrastados" donde se dice justo lo contrario. Tal y como es en el caso de un recién llegado al candelero: el ibuprofeno.
Llegados a tal punto, el exceso de información pasa a ser desinformación, y únicamente genera en la sociedad bulos y preocupaciones. Cada cual es libre de expresar su opinión, pero en estas lides sería más recomendable dejar hablar a los profesionales, puesto que, tratándose de un tema de salud, no debe ser tomado tan a la ligera.
Del ibuprofeno se ha dicho desde ser prácticamente el Santo Grial de la juventud eterna, hasta ser el mismísimo ayudante de La Parca. Quizá no debería ni llegar a originar un debate, nada en exceso, ni en carencia, todo en su justa medida. Y las controversias sobre este principio activo podrían quedar solventadas.
Convendría reiterar, nuevamente, a los usuarios del sistema de salud que los medicamentos son justamente eso, medicamentos, que no se deben consumir más que cuando es preciso y ajustándose a las dosis adecuada, como dijo Aristóteles, ni más ni menos.
En caso de duda sobre su salud, además de a internet, puede acudir a su enfermer@.