La Guardia Civil ha desarrollado una investigación en la que ha descubierto siete empresas ficticias que, de forma ilícita, daban de alta en la Seguridad Social o en el Régimen Especial de Trabajadores Autónomos (RETA) a ciudadanos extranjeros con el fin de obtener la tarjeta sanitaria y poder acceder así al tratamiento de diálisis y a la lista de espera para someterse a una intervención de trasplante renal.
La operación, denominada RENIBUS, se ha efectuado en colaboración con la Organización Nacional de Trasplantes (ONT) el Ministerio de Empleo y Seguridad Social y otras agencias dependientes del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, así como con la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid.
Según informa el Ministerio del Interior en una nota de prensa, la investigación se inició tras recibirse una denuncia de la Oficina Regional de Coordinación de Trasplantes dependiente de la Consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid, en la que se informaba de un inusual aumento de pacientes procedentes de Europa del Este, fundamentalmente de Bulgaria, en las listas de espera para trasplantes renales.
Los agentes detectaron un gran número de casos en los que personas de otras nacionalidades estaban accediendo a ellas de forma fraudulenta, incremento que venía motivado por un efecto llamada originado en Bulgaria, “basado en la excelente reputación que tiene en el extranjero el Sistema Nacional de Salud (SNS) y, en concreto, el sistema español de trasplantes”.
14 pacientes en Madrid
Tras viajar a España, estas personas se dirigían a una consulta de un centro de salud manifestando que se encontraban de vacaciones o visitando a un familiar y solicitando el tratamiento de hemodiálisis que se ofrece como urgencia médica. En algunos casos, acudían a los hospitales el mismo día de su llegada a nuestro país.
Después de acudir regularmente al tratamiento, los pacientes se empadronaban, se registraban como extranjeros residentes y se daban de alta en la Seguridad Social como trabajadores autónomos o por cuenta ajena, sin que llegasen en ningún caso a realizar actividad laboral alguna.
Como indica Interior, a los investigadores les llamó la atención que pacientes que, en su mayoría, necesitaban de hasta cuatro horas diarias de tratamiento médico incompatibles con cualquier actividad laboral, se diesen de alta como jardineros, empleados de hogar o trabajadores de la construcción. Por ello, se comprobó la veracidad de estas actividades profesionales con la Inspección de Trabajo, verificando que estaban basadas en altas fraudulentas para, posteriormente, poder obtener la tarjeta sanitaria que les garantizaba todos los servicios y prestaciones del sistema sanitario público.
En este marco, en la Comunidad de Madrid se ha detectado a 14 pacientes que, de forma fraudulenta, se estaban sometiendo al tratamiento de diálisis o que ya habían sido trasplantados, ocasionando un coste total de más de 1,5 millones de euros.
No se descartan casos en otras CCAA
Después de que varios de los primeros pacientes fueran trasplantados en España, se produjo un efecto llamada entre sus compatriotas, muchos de los cuales se encontraban ya en la búsqueda del trasplante en otros países europeos. Varios artículos publicados en la prensa búlgara y el éxito del sistema de trasplantes español, conocido internacionalmente, colocaron a España en el punto de mira para la comisión de esta actividad delictiva.
Según apunta el Gobierno en su nota de prensa, con esta investigación “se ha abortado una operación de turismo sanitario ilegal que, de haber continuado, hubiera perjudicado a los pacientes que se hallaban lícitamente en lista de espera”.
La operación, desarrollada inicialmente en la Comunidad de Madrid, ha abierto la puerta al estudio en otras comunidades autónomas, donde podrían detectarse nuevos fraudes.
Los delitos contra la Seguridad Social contemplados en el Código Penal están castigados con penas de entre seis meses a tres años y, en función de su gravedad, pueden llegar hasta los seis años, además de una multa y el reintegro de las prestaciones indebidamente obtenidas.
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