Los investigadores están utilizando modelos matemáticos para comprender mejor los efectos de las interrupciones como el horario de verano, los turnos de trabajo nocturnos, el desfase horario o incluso mirar el teléfono a altas horas de la noche en los ritmos circadianos del cuerpo.
Cronodisrupción, la gran amenaza para el reloj circadiano que eleva el riesgo de obesidad y diabetes
El buen funcionamiento del ritmo impuesto por el ciclo sueño-vigilia, controlado por relojes genéticos a nivel cerebral y de manera específica en cada órgano, es un determinante de salud, una pieza clave en el correcto funcionamiento de nuestro organismo, de forma que su disrupción o alteración se asocia con la aparición de enfermedades metabólicas.