
Hace unas semanas Sacyl fue galardonado con el Premio CIO Directions 2014 a la Innovación en el Sector Sanitario por la Cloud Security Company, como reconocimiento al desarrollo de la historia clínica informatizada en toda la Comunidad. Sin embargo, el desarrollo de la informatización en el sector sanitario en nuestra Comunidad lleva años incorporándose, y el mismo se está produciendo con una lentitud y con grandes altibajos que redundan en los pacientes y en los trabajadores del sector.
Se han creado tres modelos de historia clínica diferentes: Medora para Atención Primaria, Gacela para Enfermería hospitalaria y Jimena para la historia médica hospitalaria. Cada uno ha llevado su desarrollo, y ahora tienen que conseguir unificarlos, pero ¡no son compatibles! Ello determina que prácticamente el sistema se bloquee o no esté operativo frecuentemente y que se generen fallos y retrasos en la atención, sobrecargando a los trabajadores, tanto sanitarios como administrativos, obligando a los pacientes a volver para resolver sus demandas y, en ocasiones, produciéndose situaciones que pueden comprometer la seguridad del paciente.
En algunos consultorios locales es imposible conectarse a la red de la que depende la historia, con lo que los pacientes son atendidos sin poder acceder a la misma.
En las tres últimas semanas el problema ha llegado al extremo, porque en el último año se había implantado un nuevo módulo para que los productos que necesitan aprobación de la Inspección (pañales, medias, algunos medicamentos…) fueran visados por el mismo programa y la receta no necesitara ser revisada por Inspección. Pero, ¿qué ha pasado? El módulo VERE (así se llama) no es compatible con Medora y ha tenido que ser retirado, no sin haber ocasionado grandes problemas, retrasos, masificación y malestar (por no hablar de desesperación) entre trabajadores y pacientes. En la actualidad, el módulo se ha desactivado y los pacientes tienen que pasar por Inspección en la avenida de Mirat para sellar sus recetas.
¿De verdad nuestra Comunidad está tan atrasada para que, tras casi 10 años desde que se iniciaron las inversiones en la informatización, a estas fechas sigamos con estos problemas? ¿O es que las cosas no se han hecho correctamente?
Probablemente, las personas que nos gobiernan no son las más aptas, y necesitamos un cambio.
El proyecto de visado electrónico fue desarrollado en Nodalia en los años 2007 y 2008 pero los responsables de Sacyl de aquel entonces (Cruces, Raído y Peciña) fieles a su decisión de no contar con esta empresa, decidieron desarrollar de nuevo el proyecto con otras empresas “más afines” a ellos. Esto ha supuesto, como en el caso de otras aplicaciones informáticas, duplicar los costes en desarrollo de productos ya existentes y contrastados sustituyéndolos por nuevos desarrollos. Estas malas decisiones las toman unos pocos y las pagamos todos…