La estrategia de diagnóstico, vigilancia y control en la fase de transición de la pandemia de COVID19 no sólo ha sido consensuada, publicada y difundida en todos los canales oficiales y medios de comunicación, sino que se ha convertido en una de las prioridades asistenciales que reseñan cada día en sus comparecencias tanto el director del Centro de Alertas a nivel nacional, Fernando Simón, como la consejera de Sanidad de Castilla y Léon, Verónica Casado, quien asegura día tras día que se establecerán los refuerzos necesarios en el primer nivel asistencial para que "seamos capaz de detectar los nuevos positivos en 24 horas, aislarlos y hacer el seguimiento a los contactos más estrechos".
Hasta aquí la teoría, pero en la práctica las sociedades científicas que agrupan a los médicos de Familia ya han avisado que faltan recursos, tanto técnicos como humanos, para asumir este papel protagonista que ahora las autoridades sanitarias quieren darle a la Atención Primaria. Y la realidad viene a darles la razón día tras día, porque cuando no faltan PCR, faltan hisopos o reactivos, y cuando no, los médicos tienen tal saturación en los teléfonos que ni siquiera pueden atender las consultas que les plantean sus pacientes.
Pero, incluso, asumiendo como les toca el control de todos los síntomas compatibles con la enfermedad, cada día más y más variados, como tos, fiebre, dolor de garganta, pérdida de olfato y gusto, diarrea o dolores musculares y de cabeza, y pidiendo, como manda el protocolo, la prueba diagnóstica pertinente, luego tienen que iniciar una carrera de obstáculos para lograr el objetivo final y deseado: poder hacer el diagnóstico preciso y actuar en consecuencia.
Covid-Auto con colas
Como ejemplo, en el centro de salud San Juan de Salamanca todavía esperan hoy conocer los resultados de PCR que se solicitaron con carácter urgente el pasado lunes, 4 de mayo. El miércoles, incluso, como los pacientes ni siquiera habían sido citados para la toma de muestras, los facultativos tuvieron que insistir, para, finalmente, lograr que la prueba se realizara el jueves por la tarde.
Ese día, en las instalaciones de la ITV de Carbajosa de la Sagrada habilitadas como espacio Covid-Auto para la recogida de muestras de los usuarios en su propio vehículo, se acumulaba una cola de más de una hora, pese a que todos acudían con cita previa y que es indispensable evitar las aglomeraciones de todo tipo, mucho más tratándose de posibles infectados con el SARS-Cov-2.
Pese a que los resultados de las pruebas de detección molecular se obtienen en un plazo de 24-48 horas, pasados cuatro días todavía se desconoce, en algunos casos, si los pacientes son positivos o no por coronavirus.
Circunstancias que incumplen las pautas asistenciales marcadas por las propias autoridades sanitarias y que exigen, como aseguran los médicos de Atención Primaria, una dotación real de medios personales y materiales para poder llevar a cabo la labor fundamental que debe hacerse desde el centro de salud en la contención de la pandemia.