¿Has visto en la piel de tu hijo algún tipo de inflamación o rojez muy seca? Si es así, cabe la posibilidad de que el pequeño padezca algún problema dermatológico o, incluso, dermatitis atópica. Es necesario que comience cuanto antes un tratamiento que permita llegar a eliminar la lesión, también conocida como eccema, o, por lo menos, a reducir sus efectos.
Pero, ¿cómo se distingue una dermatitis atópica? Esta enfermedad de la piel, que puede aparecer en en bebés, niños y en adultos, se muestra con rojeces e inflamaciones en la piel. Puede presentarse de forma continuada o solo en ciertos periodos del año, y eso es debido a que puede tener diferentes causas. Tiene un tacto áspero, reseca la piel y puede producir picores, por ello es recomendable ponerle solución cuanto antes.
Es común que aparezca en las personas cuando aún están en la niñez. Algunos afectados la tienen crónica y en otros, solo en ciertos momentos de su vida o del año. En el enlace de esta web, se puede encontrar más información.
¿Qué causa la piel atópica?
Hay muchas causas que pueden ser el precedente de una dermatitis en un niño o una niña. Por ejemplo, la genética. Es probable que alguien de la familia, como el padre, la madre, tíos o hermanos, tengan también la misma patología. También puede ser que las personas afectadas padezcan alguna alergia o asma, que también se hereda en muchas ocasiones. Así, debido a la herencia genética, los descendientes pueden tener un problema en la piel que les impida crear la humedad que esta necesita para protegerse.
También puede deberse a las alergias alimentarias. Si tu hijo o hija no tienen antepasados con eccema, puede suceder que tengan algún tipo de alergia alimenticia que no sepas.
¿Tiene cura?
No se ha encontrado aún una cura muy efectiva para esta patología en adultos. Pero, en los niños, si se diagnostica a tiempo, se puede eliminar antes de que lleguen a la pubertad. Y, en todo caso, sí que hay medidas que se pueden tomar para que sus efectos sean mucho más livianos y evitar tantas molestias. Sobre todo, los médicos recomiendan comenzar el tratamiento nada más que seas consciente de que tu retoño pueda padecer de esta enfermedad.
Lo primordial, es acudir al pediatra del pequeño. Primero, para que se pueda conocer la causa de la dermatitis atópica y descartar que el niño o la niña sean alérgicos a alimentos muy comunes, como la leche de vaca o los huevos. Pero también para aprender ciertas recomendaciones, sobre todo en cuanto al contacto de tu hijo con el agua y sobre la ropa que le puedes poner. Recuerda que un eccema puede picar mucho, pero esta situación se puede aliviar.
¿Cómo puede interactuar un niño que padece piel atópica con el agua?
La higiene de una persona con eccema debe llevarse a cabo con unas pautas muy concretas y con gran cuidado. Algunas recomendaciones sobre cómo bañarse cuando la piel padece estos problemas son las siguientes:
Baño o ducha diaria. Si la higiene es siempre importante, en este caso lo es mucho más y se recomienda hacerlo todos los días. Ahora bien, no vale de cualquier forma. Debes saber que los bebés deben usar agua tibia (más caliente que fría) y evitar esponjas o cualquier elemento que no sean las manos para frotar con el producto. Ten cuidado con el jabón que apliques, se necesita algún aceite especial para bebés con eccema que hidrate la piel.
Los niños más grandes pueden usar geles, pero que sean naturales, sin detergentes. Si es un caso severo, pueden usarse aceites especiales y recomendados específicamente para la dermatitis. El niño debe permanecer en el agua unos 15 minutos. Para secar el cuerpo deben usarse toallas de algodón y que no se hayan lavado con detergentes agresivos.
Piel hidratada. Cuando se acaba el baño, sobre la piel seca, debe usarse una crema hidratante infantil y que sea específica para pieles con eccema.
Cuidado en la piscina. El agua de la piscina puede irritar. Pero puede revertirse el problema lavando bien el cuerpo justo al salir de la piscina. Si hay un brote de dermatitis, mejor no volver a bañarse en este tipo de agua por un tiempo.
Por su parte, el agua del mar es muy beneficiosa. Eso sí, los bebés con esta patología no deberían exponerse al sol. Y los mayores, con mucha protección.
¿Qué productos pueden mejorar la situación?
Debes consultar al pediatra o a un farmacéutico qué es lo que más conviene para tu hijo, según la situación de su piel y la edad del pequeño. El objetivo es disminuir el brote, que tengan menos tendencia a aparecer, reducir el picor y la sequedad o incluso que, con el paso de los años, llegue a ser un problema mucho menor.
Recordamos que SALUD A DIARIO es un medio de comunicación que difunde información de carácter general relacionada con distintos ámbitos sociosanitarios, por lo que NO RESPONDEMOS a consultas concretas sobre casos médicos o asistenciales particulares. Las noticias que publicamos no sustituyen a la información, el diagnóstico y/o tratamiento o a las recomendaciones QUE DEBE FACILITAR UN PROFESIONAL SANITARIO ante una situación asistencial determinada.
SALUD A DIARIO se reserva el derecho de no publicar o de suprimir todos aquellos comentarios contrarios a las leyes españolas o que resulten injuriantes, así como los que vulneren el respeto a la dignidad de la persona o sean discriminatorios. No se publicarán datos de contacto privados ni serán aprobados comentarios que contengan 'spam', mensajes publicitarios o enlaces incluidos por el autor con intención comercial.
En cualquier caso, SALUD A DIARIO no se hace responsable de las opiniones vertidas por los usuarios a través de los canales de participación establecidos, y se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso cualquier contenido generado en los espacios de participación que considere fuera de tema o inapropiados para su publicación.
* Campos obligatorios