La radiocirugía en el cáncer de próstata permite reducir las sesiones y obtener los mismos resultados que en el tratamiento estándar de radioterapia. En este caso, se aplica mayores dosis de rayos sin tener ningún efecto secundario a mayores. La tecnología permite la precisión para tratar el tumor de forma muy localizada y precisa. En España, Salamanca es el único centro sanitario público donde se aplica, y que en año y medio ha llegado a 40 pacientes.
La radiocirugía prostática se implantó en el Complejo Asistencial de Salamanca en mayo de 2012. Desde esa fecha se han beneficiado de esta técnica novedosa cerca de 40 pacientes. En España, solo seis centros la aplican y el hospital salmantino es el único público. Con este tratamiento se consigue reducir las sesiones de 20 a ocho días, “al comprobar que con sesiones más fuertes se conseguía el mismo efecto, e incluso mejor, y sin embargo, a los tejidos sanos no les afectaba más”, detalla el jefe de sección de servicio de Oncología Radioterápica y responsable de la Unidad de Tumores Urológicos, Víctor Macías. Este especialista fue pionero en utilizar esta técnica en España, cuando trabaja en otro centro hospitalario en 2004.

La radiocirugía para el cáncer de próstata es posible gracias a la tecnología que tienen a su alcance. “Tenemos unas técnicas que nos permiten adaptar la dosis al volumen que queremos tratar, a la forma del tumor”, especifica. Al paciente seleccionado para aplicarle esta técnica se le realiza un escáner especial, “digamos que para tomar las medidas de su cuerpo”, y luego ya viene a tratarse. El cuerpo de cada persona nunca está idéntico y como el tratamiento está localizado al milímetro en el tumor y su zona, “esta tecnología permite que cada día realicemos un pequeño escáner para comprobar los posibles cambios”. En este sentido, el paciente juega un papel importante y tienen que seguir una serie de consejos, como qué tienen que comer, determinados hábitos de vida que tienen que hacer, etc. “Queremos que el cuerpo por dentro no cambie, el intestino, la vejiga, los músculos, y que estén lo más parecido posible en cada sesión”, subraya el doctor Macías.
Los primeros en aplicar este tipo de radioterapia fueron los americanos, con una experiencia cercana a la década, y donde han demostrado que es un tratamiento “totalmente seguro”, enfatiza. Para la implantación en el hospital de Salamanca comenzaron poco a poco, en el primer semestre a unos seis pacientes, ya que según este oncólogo radioterápico, “se necesita su curva de aprendizaje”, y ya en 2013 han tratado a muchos más, llegando casi a los 40. E irá más, según subraya el jefe de sección. De hecho, al ritmo que llevan confían en que en la primavera de este año, “seremos el centro de España con más experiencia”, porque en otros hospitales que llevan más tiempo no han alcanzada la cifra del centro salmantino, o similar.
Los primeros resultados que han obtenido ya están publicados, porque creen que es importante transmitir dicho conocimiento. “Los resultados son muy buenos y los efectos secundarios que tenemos al menos son tan bajitos como en el tratamiento convencional”, afirma Macías. Respecto al tema de la curación, será el paso de los años lo que lo determine, y de momento, a ninguno de ellos les ha vuelto a aparecer el tumor.

Para los profesionales que aplican esta técnica requiere de mayor dedicación. Entre otros motivos porque tiene controles de calidad que realizan tanto los médicos como los radiofísicos. Por ejemplo, el médico lleva un control personal de cada una de las sesiones de tratamiento, “se supervisa uno a uno”. Y no solo tratan a pacientes de Salamanca sino también de Ávila y Zamora, entre otras provincias más puntuales. En estos casos reducir las sesiones a ocho supone un importante ahorro en transporte sanitario y el inconveniente que ocasiona al paciente. Asimismo, han calculado que por cada 30 hombres que trata con esta técnica deja huecos libres para que se puedan tratar de otros tumores a otros 45. “Ayuda a optimizar los recursos”, insiste. En este sentido, el doctor Víctor Macías recuerda que la tecnología no tiene que ser más cara, y muchos estudios indican que la radiocirugía de la próstata es “coste efectivo”. Si el tratamiento es bueno, los pacientes no recaen, y de esta forma no tienen que poner tratamientos crónicos para mantener el tumor de por vida. “Si la calidad de vida del tratamiento es buena no necesitas hacer luego cirugías para la incontinencia, ni pagar pañales durante toda la vida, o el hecho de tener que venir a Urgencias por problemas”, enumera. Se han dado casos que tras darse las ocho sesiones, los pacientes siguen trabajando, “ni siquiera se piden la baja”.
Prevalencia del cáncer de próstata
El de próstata es el cáncer más frecuente en el hombre y cada año que pasa la frecuencia es mayor, por la edad y por el diagnóstico precoz. El incremento de la esperanza de vida incrementa el número de casos, “porque es un tumor relacionado con la edad, y se suele dar entre los 65 y 70 años”. Este tumor es el que más se trata en los servicios de Oncología Radioterápica, y si se ven unos 1.000 pacientes al año, unos 300 son de próstata.

Cuando con cáncer de próstata es seleccionado para aplicarle radiocirugía acude al hospital a recibir ocho sesiones en días alternos, y cada una de ellas, de una duración de 25 minutos, de los cuales no llegan a 10 el tiempo que recibe los rayos, el resto es de preparación. “El paciente está tumbado y no se entera de nada”, confirma Macías. Y antes de aplicarse esta técnica por primera vez, el tratamiento fue aprobado por el comité de ensayos clínicos y por la Agencia Española del Medicamento de los Productos Sanitarios. Desde hace años, la radiocirugía se aplica a otro tipo de tumores, como en el pulmón, en metástasis del hígado, los vertebrales y desde hace más tiempo en los de cabeza.
Primeras jornadas nacionales
En el Complejo Asistencial de Salamanca se organizaron las I Jornadas Nacionales de Radiocirugía Prostática (SBRT, Stereotactic body radiation therapy) donde acudieron 70 profesionales, en especial oncólogos radioterápicos y radiofísicos, procedentes de diferentes hospitales y centros especializados de España y Portugal. “La idea era crear un grupo, compartir experiencias, incluso en cada centro hay pequeñas diferencias, crear un lenguaje común”, apunta Víctor Macías, como uno de los organizadores del encuentro. Por otra parte, piensan realizar una publicación con consejos para los profesionales que empiezan con la técnica, convertirlo en una guía. Por último, acordaron organizar una reunión anual sobre este tratamiento específico, “la experiencia te permite avanzar más rápido”.
Es posible aplicar este tratamiento a pacientes con metastasis en huesos siendo el cancer de prostata el originario ?
me encuentro en Venezuela, mi hijo DOMENICO ANTOLINI de 21 años de edad , ha sido diagnosticado con adenocarcinoma en el esófago, grado I, la recomendación medica es someterse de manera urgente a una cirugía, sin embargo en el país no se cuenta con los profesionales que puedan realizar la cirugía, ya asumir aquí los costos de esta cirugía es casi imposible para nosotros, asumirlos en el extranjero es impensable, acudo a ustedes solicitando la ayuda humanitaria para recibir el caso de mi hijo, su diagnóstico temprano le ofrece la oportunidad de erradicar esta enfermedad…les ruego puedan usted ayudarme. mi telefoneo es 04127611380