“A partir del lunes, el 70% de la ciudadanía estará en fase 2, el 30% de la población entrará en fase 1 y 45.000 personas en fase 3”, tal y como ha asegurado el ministro de Sanidad, Salvador Illa, acompañado por el director de Coordinación de Alertas y Emergencias, Fernando Simón, para informar del nuevo escenario de la desescalada en España por la pandemia de COVID-19.
Así, tal y como puede observarse en el mapa, sólo la comunidad de Madrid, Barcelona capital y Lleida, y toda Castilla y León, excepto la comarca leonesa de El Bierzo, seguirán en la fase 1, tras “una valoración cuantitativa y cualitativa integral de las propuestas de las CCAA, que también son discutidas en reuniones bilaterales”, como ha explicado el ministro.
De hecho, esta vez se han tenido en cuenta casi todas las peticiones, a excepción de algunas licencias que pedía Madrid aún admitiendo que debía seguir en fase 1. De este modo, los cambios afectarán, en primer lugar, a las cuatro islas que primeramente superaron las restricciones y que pasarán a la fase 3: Formentera, en Baleares y La Gomera, El Hierro y La Graciosa, en Canarias.
Los territorios que pasan a la fase 2 son en Castilla-La Mancha: Toledo, Ciudad Real y Albacete; toda la Comunidad Valenciana: Castellón, Valencia y Alicante; en Cataluña: Girona, Cataluña Central, Alt Penedès y El Garraf; en Murcia: Totana, que se había quedado rezagada por un rebrote; en Andalucía: Granada y Málaga; y en Castilla y León, la comarca de El Bierzo.
Sobre la evolución de la pandemia, que hoy deja 237.906 casos confirmados y 27.119 fallecidos, el ministro ha asegurado que se confirma “la tendencia sostenida positiva de los últimos días y que el estado de alarma ha funcionado”.
Peticiones de Madrid
Salvador Illa también ha explicado que no se han atendido las medidas de flexibilización solicitadas por Madrid, entre otras razones, porque no ha alcanzado los 170 rastreadores y los 600 médicos solicitados en los centros de salud para el diagnostico precoz y el seguimiento de los casos. La comunidad también había pedido la vuelta a las aulas de los alumnos pendientes de la EBAU, pero “es algo que no está permitido por el estado de alarma en la fase 1”, ha recordado el ministro.
Cobernanza y normativa
El ministro ha explicado que el proceso de transición a una nueva fase se lleva a cabo siguiendo el proceso de cogobernanza establecido. Como se viene realizando cada semana, el Ministerio de Sanidad mantiene reuniones bilaterales con las comunidades autónomas que presentan solicitudes para cambiar de fase u obtener una mayor flexibilización de las medidas.
Entre ayer y hoy, el ministro y su equipo se han reunido con los técnicos y consejeros de nueve gobiernos regionales. Illa les ha agradecido “el enorme trabajo que están realizando y su convencida colaboración para adoptar, en el proceso de desescalada, decisiones con el mayor grado de consenso”. Estas decisiones se toman en base a un análisis conjunto cuantitativo y cualitativo de distintos parámetros desde un punto de vista integral.
El ministro ha recordado que España ha pasado de tasas de contagio del virus de más del 30% a un porcentaje 30 veces menor. No obstante, ha hecho un llamamiento a la prudencia y a la responsabilidad. “El riesgo de posibles rebrotes existe y, por tanto, la cautela es el mejor aliado”. En esta fase de transición, “un comportamiento igual de responsable y ejemplar como durante el confinamiento será la mejor receta para llegar a la meta que buscamos: la derrota del virus”, ha concluido.
Las medidas establecidas para la fase 2 están detalladas en la Orden del pasado 16 de mayo, disponible en el Boletín Oficial del Estado (BOE). El pasado miércoles, se publicaron una serie de flexibilizaciones de las fases 1 y 2, respondiendo así a las demandas expresadas por algunas comunidades autónomas. El próximo sábado, el BOE publicará la orden relativa a las medidas establecidas para la fase 3.
> Guía de la Fase 1 del Plan para la transición hacia la nueva normalidad
> Guía de la Fase 2 del Plan para la transición hacia la nueva normalidad
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