Si el pasado 22 de septiembre la Diócesis de Salamanca anunciaba la puesta en marcha del proyecto Ranquines para personas con enfermedad mental en riesgo de exclusión social, hoy el inicio de su primera fase, la construcción de un centro de día, es ya una realidad al haberse iniciado la obras de adecuación en la fachada este del imponente edificio de Los Páules en Santa Marta.
Responde a la propia razón de ser de la Iglesia, al detectar, sobre todo desde el día a día de Cáritas, la existencia de personas con problemas de salud mental sin una correcta asistencia, y ha recibido, igualmente, el apoyo de quienes forman la comunidad católica en Salamanca.
Primero, porque el proyecto “es fruto social de la asamblea diocesana”, en palabras del obispo de Salamanca, Carlos López, y segundo, porque no sólo ha implicado a la Diócesis, Cáritas, Congregación de la Misión, Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, Hermanas de Nuestra Señora de la Consolación, Parroquia el Milagro de San José y Religiosas de los Sagrados Corazones, sino también a los salmantinos que han participado en las colectas parroquiales o han realizado donaciones particulares hasta alcanzar los 75.600 euros, tal y como explicó el coordinador del área social de los Páules, Francisco Berbegal.
El proyecto se incorpora a la estructura legal de Cáritas Diocesana de Salamanca y contará con una comisión coordinadora que estará compuesta por un representante de cada una de las entidades firmantes, para todo lo referente a la organización y gestión del proyecto.
Ha sido realizado por el arquitecto Jacinto Bolao García, del Estudio Luja, y las obras están ya en manos de Construcciones Golpejas, seleccionada en enero entre las cuatro empresas licitantes por un total de 490.000 euros.
El centro de día estará situado en la planta semisótano y planta baja de la fachada principal este. Aunque se intervendrá en tres plantas más para realizar una escalera y un ascensor que darán servicio a todo el edificio, para así cumplir la normativa actual de incendios y evacuación. El plazo de ejecución es de siete meses, con lo que se espera poder abrir el centro a finales del mes de septiembre de este año.
Tal y como fue explicando el arquitecto técnico de Obras de la Diócesis, Fernando Delgado, el acceso al Centro de Día será por la fachada este, directamente a la planta semisótano, donde se encontrará la recepción, una sala de estar, comedor, oficio y aseos ocuparán el espacio del torreón, y a la derecha de un largo pasillo estarán los vestuarios, salas de reuniones para los voluntarios y los cuarto de limpieza y calderas.
En la planta baja se encontrarán los despachos de los profesionales y los espacios de actividades, con tres aulas taller, una sala polivalente para formaciones, asambleas o terapias grupales, sala de reuniones y espacios para archivo, almacén de materiales y aseos.
Profesionales y usuarios
Para ponerlo en marcha, se empezará en breve tanto la formación de los trabajadores, en principio un coordinador, dos educadores, dos monitores y un psicólogo, como la selección de los posibles usuarios.
Empezando por esas 50 personas con enfermedad mental de Salamanca en situación de exclusión social, que van y vuelven de instituciones psiquiátricas e incluso penitenciarias y no mejoran sus condiciones de vida, sin descartar tampoco dar cabida “a otros enfermos y a sus familias” con proyectos de colaboración que puedan llevarse a cabo en un futuro, teniendo en cuenta, además, que los talleres pueden ampliar sus horarios, “o puede haber personas que quieran venir a un sólo taller, o estar un rato en el centro leyendo la prensa, o participar en un actividad en Salamanca, y desde aquí hacerles el acompañamiento”, explicó Berbegal.
De hecho, comentó que incluso había recibido ya una llamada de Valladolid interesándose por el centro, lo que demuestra la importante demanda de este tipo de prestación para enfermos de salud mental. Por este motivo también ya se ha reservado la primera planta de esta zona de los Paúles para poner en marcha la segunda parte del proyecto Ranquines, una mini residencia con 16 habitaciones individuales con aseo, comedor y sala de reuniones, “aunque en este caso deberían implicarse las administraciones públicas”.
La tercera fase llegaría con la puesta en funcionamiento de pisos de inserción en la ciudad, donde las personas afectadas podrían llevar una vida autónoma, reintegrarse en la sociedad y recibir el acompañamiento y la atención necesaria por parte de los voluntarios de Cáritas.
Recordamos que SALUD A DIARIO es un medio de comunicación que difunde información de carácter general relacionada con distintos ámbitos sociosanitarios, por lo que NO RESPONDEMOS a consultas concretas sobre casos médicos o asistenciales particulares. Las noticias que publicamos no sustituyen a la información, el diagnóstico y/o tratamiento o a las recomendaciones QUE DEBE FACILITAR UN PROFESIONAL SANITARIO ante una situación asistencial determinada.
SALUD A DIARIO se reserva el derecho de no publicar o de suprimir todos aquellos comentarios contrarios a las leyes españolas o que resulten injuriantes, así como los que vulneren el respeto a la dignidad de la persona o sean discriminatorios. No se publicarán datos de contacto privados ni serán aprobados comentarios que contengan 'spam', mensajes publicitarios o enlaces incluidos por el autor con intención comercial.
En cualquier caso, SALUD A DIARIO no se hace responsable de las opiniones vertidas por los usuarios a través de los canales de participación establecidos, y se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso cualquier contenido generado en los espacios de participación que considere fuera de tema o inapropiados para su publicación.
* Campos obligatorios