La Consejería de Sanidad estudia “reorganizar los recursos dentro de las demarcaciones” para mejorar la Atención Primaria

Durante una visita al Complejo Asistencial Universitario de Salamanca (CAUSA), donde se ha reunido con los responsables sanitarios del Área de Salud, Casado ha querido recalcar que disponemos “de un buen sistema de Atención Primaria, que es mirado desde todos los puntos de este planeta”, al igual que sucede “con nuestra Organización Nacional de Trasplantes y con nuestro sistema de formación MIR”.

Por ello, ha explicado, “no partimos de una mala posición”, aunque ha reconocido que está “absolutamente claro que existen áreas de mejora” y que “algo pasa” cuando, a pesar de disponer “de muchos recursos, existe insatisfacción”.

“Si en Castilla y León tenemos un médico por cada 916 habitantes, cuando la media nacional es de uno por cada 1.200, y aun así hay zonas rurales donde no estamos llegando bien y zonas de salud urbanas con lista de espera, algo tenemos que hacer para que la población se sienta bien atendida, pero organizando bien el sistema, porque cuando algo no es eficiente además es caro”, ha indicado en rueda de prensa.

No obstante, la máxima responsable sanitaria de Castilla y León ha preferido no adelantar qué medidas podrían adoptarse para llevar a cabo esta reordenación de la Atención Primaria que, según apuntaba ayer Francisco Igea, incluirá la puesta en marcha de “planes piloto” antes de que termine 2019 para evaluar el “impacto” de los cambios. 

“En estos momentos podría decir lo que tengo yo en la cabeza, pero no lo que va a suceder al final, porque vamos a ir hablando con las personas que mejor conocen la realidad de cada zona básica de salud (ZBS) –profesionales de Sacyl, farmacéuticos, alcaldes…– para adaptarlo a sus verdaderas necesidades”, ha indicado Casado, que ha comparecido ante los periodistas acompañada del gerente regional de Salud, Manuel Mitadiel, y del gerente del CAUSA, Luis Ángel González.

Apuesta por la “eficacia de nivel”

Al inicio de su intervención ante los medios, la nueva consejera de Sanidad ha puesto sobre la mesa las líneas maestras que guiarán la labor que se desarrollará desde su departamento, entre las que destacó “la mejora de la efectividad y la equidad” del sistema público de salud en Castilla y León. Para ello, ha considerado esencial la mejora de la accesibilidad, tanto “económica, geográfica y organizativa”, para lo que es clave, ha dicho, proporcionar “fluidez y flexibilidad al sistema” con el fin de responder a sus problemas reales.

En este sentido, Verónica Casado ha apostado por lo que ha denominado “eficacia de nivel”, que ha resumido así: “Si algo puede hacerlo un administrativo, que no lo haga una enfermera; si algo puede hacerlo una enfermera, que no lo haga un médico, y si lo puede hacer Atención Primaria, que no lo haga Atención Especializada. Para ello, necesitamos una Atención Primaria potente”.

Del mismo modo, la titular de Sanidad ha subrayado la importancia de garantizar la “viabilidad” del sistema mediante su “sostenibilidad”, al igual que la seguridad, es decir, “por acciones que no causen daño a nuestros pacientes, y en este objetivo vamos a potenciar la estrategia No Hacer”.

En cuanto al personal de Sacyl, la responsable sanitaria ha asegurado que su equipo se quiere poner “al servicio de los profesionales para que tengan los mejores niveles de competencia y, al mismo tiemo, se limiten las barreras cotidianas a las que se enfrentan”.