La presidenta de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) repasa la labor de esta entidad privada que ofrece un servicio integral gratuito tanto a los enfermos como a sus familiares. Además, con su inversión en investigación sobre esta enfermedad hace posible que se siga avanzando, algo más importante aún en época de crisis, cuando se han reducido las ayudas públicas para investigar. Su apuesta está clara: revertir toda la ayuda en la sociedad.
¿Cuál es el papel de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) y a quiénes ayudan?
Atendemos todo tipo de cáncer y de edades. Nuestro trabajo es a todos los niveles. Para cualquier tipo de asociación lo importante es cubrir la parcela a la que está dedicado. Nosotros atendemos a los enfermos y a muchos familiares. Tenemos bastantes niños de enfermos oncológicos, sus padres. El cáncer se da en personas jóvenes, y tenemos unos cuantos niños que están viniendo a terapias con la psicóloga. Aquí son niños con familiares enfermos de cáncer. Los enfermos de cáncer son su referente, materno, paterno, sus hermanos… Lo que hacemos es que lo afronten de la mejor manera posible, con naturalidad; es una enfermedad que afecta en la familia, porque los tratamientos son largos e implican funcionar de otra manera. Tiene unas connotaciones en tu vida familiar y en lo físico, hay cambios en la persona que padece cáncer, pierde el pelo… Se trata de ayudar a entender; los niños entienden todo bien, aunque es duro.
Antes se tendía más a ocultar la enfermedad, en especial a los niños…
Antes nadie tenía un cáncer. No se enteraba nadie, sino de que estabas enfermo, independiente del resultado final de la enfermedad, pero no se enteraban los hijos ni nadie de alrededor. Ahora ha cambiado por completo. Antes, incluso la mayoría de las veces ni el propio enfermo se enteraba de que tenía un cáncer, porque se ocultaba. Lo entiendo también, pero hemos avanzando mucho. Mucha gente que padecía un cáncer podía vivir más o menos, pero sabía que el resultado, al final, era la muerte. Pero hoy no, hay una supervivencia impresionante en casi todos los tipos de cáncer, en unos más y en otros menos. Y está la prevención, que es muy importante.
Esa prevención es una de vuestras tareas principales también ¿Qué importancia tiene?
La prevención para nosotros es muy importante, y con las campañas que se hacen desde la AECC en este país se han dado pasos de gigante gracias a ellas. La labor de la AECC para que el cribado del cáncer de mama fuera una realidad fue muy importante, y hoy lo es. Actualmente más de 90% del cáncer de mama en estadios primarios se cura. Es por la educación. ¿Quién iba antes a hacerse una mamografía? Ahora la lucha es con el cáncer de colon, cuyo cribado se consiguió que estuviese en la cartera de servicios del sistema de salud, y otro de nuestros grandes retos es la investigación. Investigamos todo tipo de cáncer, pero en 2007 la asociación vio que no se financiaba desde las instituciones públicas la investigación en cáncer infantil. Se diagnostican una media de 1.100 casos; realmente no hay un impacto en número para la financiación del Estado, pero el impacto social es bestial, y la AECC, desde ese año, se planteó que teníamos que convocar desde nuestra propia institución unas becas destinadas únicamente a la investigación del cáncer infantil. Han tenido activos más de cuatro millones y medio de euros, solo para el cáncer infantil.
¿Qué labor desarrolla la AECC en materia de investigación?
Tenemos muchos estudios científicos. La AECC ahora mismo está inviertiendo 29 millones de euros en investigación. Somos la entidad privada que más investigación financia en este país y en Europa. Hemos procurado mantener esas líneas de investigación. Estamos todo el día pidiendo, pero nos ayuda mucho la gente, salimos a la calle a hacer cuestación, y es para investigar. Céntimo que entra en la asociación, céntimo que sale y revierte en la sociedad. Todo está justificado y las cuentas a disposición. Llevamos casi 63 años trabajando y no ha habido un problema nunca. Todo el beneficio de la AECC se va a volcar y va a revertir en la sociedad. Todos los servicios de la asociación son gratuitos: los tratamientos psicológicos, las ayudas sociales, el piso de estancia… Todo el mundo tiene cabida en la AECC para que le ayudemos y nos ayuden. Nosotros también queremos que nos ayuden, que a veces cuesta también.
¿La gente es solidaria con el tema del cáncer?
Hay gente que te dice que no tiene nada que ver con eso. Este año, en la cuestación, se ha acercado una persona que el año pasado me comentó que este tema no iba con ella, pero ahora venía a pedirnos disculpas y a dar las gracias por lo que la están ayudando. Porque me dijo aquello y a los dos meses le diagnosticaron un cáncer, y se acordó. De alguna manera, esta persona necesitaba decirlo por desahogarse, por tranquilizarse. Si tuviéramos más socios fíjate lo que podríamos hacer. Los socios pueden aportar como mínimo 10 euros al año. Imagina si todos nos concienciaramos, imagina lo que hacemos ya y lo que se podría hacer. Lo que se podría hacer si la mayoría de los salmantinos, en la medida en que pudieran, fueran socios, y no ya con grandes cantidades; cuanto más mejor, pero no con grandes cantidades, lo que se podría hacer aquí. Y hacerse socio es muy sencillo, o llaman por teléfono, o se pasan por aquí, o por intenert. Y la cantidad y el tiempo la pone cada uno. La gente joven empieza a colaborar más.
Vergonzoso lo que me ha pasado con la AECC, desde hace muchos años colaboro con ellos dando generosos donativos, en noviembre de 2019 me hice socio, recibiendo a partir de ese momento boletines, información etc, en vascuence, hoy solicité en un correo electrónico que quería recibirlos en español y su respuesta ha sido que no porque ellos consideran que el vascuence es la lengua más común en Guipúzcoa, increíble. Por supuesto ya he solicitado mi baja inmediata. Hay muchas asociaciones que también luchan contra el cáncer y encima no tienen ningún inconveniente en comunicarse conmigo en español.
Soy enferma oncológica y fuí a solicitar ayuda q necesito. Todavía la estoy esperando. Pelucas usadas me querían ofrecer. Todo vergonzoso. Tanto dinero de donaciones y se lo comen ellos, los trabajadores, yo soy enferma y no he recibido nada.