La sociedad española mantiene una elevada incertidumbre e irritación, pero afronta el futuro con “mucho ánimo”

En 2015, se ha incorporado la escala del 0 al 10 para la mayoría de los indicadores, que se han distribuido en tres bloques. El primero, que mide el estado de ánimo, lo conforman seis variables; el segundo, que mide la confianza en instituciones consideradas clave, incluye siete variables; y finalmente, el panel de preocupaciones, que expone las cuatro más aludidas por los encuestados.

El panorama global del estado de ánimo que presenta la sociedad española en este 2015 es, en general, bueno. Tanto las variables positivas como las negativas alcanzan valores altos, sin embargo, el balance es “realista y optimista”. El barómetro presenta, en esta ocasión, una ciudadanía que muestra inseguridad ante el futuro, que combina a su vez con irritación. No obstante, al mismo tiempo, mira al futuro con “muchas fuerzas de ánimo”. “No hay derrotismo, hay ganas de cambio”, subraya Juan José García de la Cruz, sociólogo del Instituto de Prospectiva Internacional y autor del informe.

Además, teniendo en cuenta la crisis que ha imperado en el país en los últimos años, el nivel de calidad de vida alcanza una puntuación alta. Aún así, un 25% de la población lo sitúa por debajo del 5 en una escala del 0 al 10. Las principales preocupaciones en la vida cotidiana de la población española son las mismas que protagonizaron 2014: el paro, la crisis económica, la corrupción y el bienestar de la familia.

Por Comunidades Autónomas

Al disponer también de todos estos datos en las Comunidades Autónomas, se puede observar que no nos encontramos ante una España homogénea, sino que existen diferencias entre las regiones. Destaca, por ejemplo, Canarias como la comunidad más irritada, mientras que Extremadura es la que menor puntuación ha obtenido en esta variable. Cantabria posee la media de tristeza más baja de toda España y la Comunidad Valenciana alcanza el nivel más alto de alegría.

La combinación de las seis variables nos permite perfilar un esbozo del estado de ánimo en Castilla y León, que contrastan con los valores nacionales. Un tercer indicador apunta a las fuerzas de ánimo. A nivel nacional ha alcanzado un 6.29 de media y Castilla y León obtiene la media más baja de España, 5.81. El cuarto y quinto indicador son la tristeza y alegría, que según este estudio no son vasos comunicantes. En Castilla
y León, la tristeza alcanzó 5.69, mientras que la media nacional es de 5.58, y la alegría 5.91, 0.04 puntos más alta que la media nacional.

La calidad de vida es una magnitud que apunta al núcleo de lo que busca el Index Life y que ofrecida junto a las otras cinco variables se convierte en un buen indicador del estado de ánimo de la sociedad española. La puntuación media a nivel nacional ha sido de 5.80 y en Castilla y León es de 6.08, por encima de la media nacional.

Este año se han incluido indicadores más precisos –que conforman el segundo bloque-, con el objetivo de ofrecer una radiografía más clara y, sobre todo, poder analizar su evolución en el tiempo. Se trata de siete referencias –distribuidas en tres grupos- que permiten hacer un seguimiento del “cemento social” que significa la confianza. Tres son servicios públicos de referencia: sanidad, tribunales de justicia y fuerzas de seguridad. Otros tres apuntan al crédito de instituciones que conforman la organización social a nivel de Estado, de la Unión Europea (UE) y de la Organización de Naciones Unidas (ONU). Estos indicadores son: “nosotros mismos, como país”, UE, y ONU. El último bloque se refiere al sistema democrático.

En este caso, los españoles han mostrado menor nivel de confianza en los tribunales de justicia y en el sistema democrático. La sanidad y las fuerzas de seguridad obtienen las puntuaciones más altas.