La meritocracia pura es un concepto esquivo que parece tomar desvíos ya desde la cuna. Si la pobreza infantil se había asociado, entre otras muchas cosas, a un peor rendimiento en la escuela y a salarios más bajos en el futuro, un estudio reciente apunta por primera vez a una relación causal entre mejorar los recursos de las familias y la actividad cerebral de sus hijos.
