Aunque la exploración pulmonar mediante broncoscopia se realiza en el Hospital Universitario de Salamanca desde su apertura, la técnica no ha dejado de evolucionar en este tiempo.
En 2007, el complejo implantó una unidad específica para este tipo de procedimientos, una decisión que, entre otras mejoras, permitió la sedación de los pacientes. Además, en el año 2012 el equipo constituyó una unidad funcional con el servicio de Cirugía Torácica que ha incrementado las prestaciones y el número de pruebas, porque las dos especialidades trabajan en común poniendo al paciente “en el centro” del proceso.
La unidad de Neumología Intervencionista del complejo asistencial salamantino realiza cada año unas 1.500 broncoscopias, además de otras muchas técnicas especiales que permiten el diagnóstico y el tratamiento de numerosas patologías pulmonares. Como explica su responsable, la doctora Rosa Cordovilla, la broncoscopia funciona en el hospital desde su apertura, aunque fue en 2007 cuando se formó una unidad específica para este tipo de procedimientos que han “evolucionado mucho con el tiempo”.
Eso permitió incrementar el número y la calidad de las exploraciones porque, entre otras mejoras, comenzaron a efectuarse bajo sedación consciente. “Al enfermo no se le deprime desde el punto de vista respiratorio, así que respira de forma espontánea, aunque está dormido, por lo que no se entera de la exploración. Además, también utilizamos anestesia local para inhibir la tos durante el procedimiento, durante el que se introduce el tubo flexible a través de la boca o de la fosa nasal, dependiendo del paciente y, pasando por las cuerdas vocales, entramos a la tráquea y a los bronquios, visualizando todo el árbol bronquial”, aclara la neumóloga, quien asegura que para el enfermo la prueba no es traumática, porque no es consciente de ella. De hecho, una encuesta realizada por el equipo hace tres años concluyo que casi el 100% de los pacientes sometidos a una broncoscopia estaban “muy satisfechos” con el procedimiento.
Al acceder al árbol bronquial, la técnica, que también permite la toma de muestras, hace posible el diagnóstico de tumores, enfermedades infecciosas y otro tipo de patologías, y también desarrollar muchos tratamientos, como la reducción del tamaño de lesiones que obstruyen un bronquio, la colocación de válvulas para reducción de volumen o para corregir la fuga de aire persistente o la extracción de cuerpos extraños.
Por eso, como señala la doctora Cordovilla, aunque una exploración básica mediante broncoscopia puede durar “diez o quince minutos”, es muy frecuente que se realice diagnóstico y terapéutica en el mismo procedimiento, que en esos casos se prolonga. “Puedes hacer una broncoscopia para implantar una válvula por una fuga aérea persistente y entonces, además de ver dónde está la lesión, tienes que colocar la válvula”, comenta.
Trabajo conjunto
Además, el equipo de la Unidad de Técnicas Respiratorias Invasivas desarrolla muchas otras técnicas especiales que, en ocasiones, tienen que ser realizadas en quirófano. Es el caso de la broncoscopia rígida -utilizada para procedimientos en los que es necesario mantener la vía aérea permeable con un broncoscopio rígido, no flexible, como la colocación de una prótesis para una estenosis traqueal o la desobstrucción de una vía por un tumor pulmonar- o la criobiopsia o biopsia pulmonar con sonda de frío. “Se hace con broncoscopia flexible, pero con una sonda que saca una muestra más grande, por lo que colocamos un balón para evitar el sangrado, y el paciente tiene que estar bajo anestesia general”, indica Rosa Cordovilla.
Por ello, en el año 2012 se creó una unidad funcional con Cirugía Torácica para trabajar de forma conjunta en este tipo de casos, una iniciativa que ha supuesto “un gran avance”, porque se ha logrado poner al paciente “en el centro del proceso, optimizando los recursos para que él se beneficie”. Es decir, “se maneja al enfermo como tal, no es un paciente de Neumología o de Cirugía Torácica; tenemos sesiones conjuntas en las que se decide qué necesita: tiene un problema y se le soluciona, sin que tenga que ir de un lado para otro, según apunta la neumóloga, que añade que esta unidad funcional ha permitido aumentar el número de procedimientos y la disponibilidad de prestaciones. “Por ejemplo, el cirujano puede participar en la realización de una ecobroncoscopia para evaluar el grado de extensión de un cáncer de pulmón y así, si luego tiene que operar a ese paciente, ya sabe que está estadificado perfectamente. Trabajamos juntos”, subraya.
Recordamos que SALUD A DIARIO es un medio de comunicación que difunde información de carácter general relacionada con distintos ámbitos sociosanitarios, por lo que NO RESPONDEMOS a consultas concretas sobre casos médicos o asistenciales particulares. Las noticias que publicamos no sustituyen a la información, el diagnóstico y/o tratamiento o a las recomendaciones QUE DEBE FACILITAR UN PROFESIONAL SANITARIO ante una situación asistencial determinada.
SALUD A DIARIO se reserva el derecho de no publicar o de suprimir todos aquellos comentarios contrarios a las leyes españolas o que resulten injuriantes, así como los que vulneren el respeto a la dignidad de la persona o sean discriminatorios. No se publicarán datos de contacto privados ni serán aprobados comentarios que contengan 'spam', mensajes publicitarios o enlaces incluidos por el autor con intención comercial.
En cualquier caso, SALUD A DIARIO no se hace responsable de las opiniones vertidas por los usuarios a través de los canales de participación establecidos, y se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso cualquier contenido generado en los espacios de participación que considere fuera de tema o inapropiados para su publicación.
* Campos obligatorios