Los pesticidas y los metales pesados en el suelo pueden tener efectos perjudiciales en el sistema cardiovascular, según un artículo de revisión publicado recientemente en ‘Cardiovascular Research’, una revista de la Sociedad Europea de Cardiología (ESC, por sus siglas en inglés).
“La contaminación del suelo es un peligro menos visible para la salud humana que el aire sucio. Pero cada vez hay más pruebas de que los contaminantes en el suelo pueden dañar la salud cardiovascular a través de una serie de mecanismos que incluyen la inflamación y la interrupción del reloj natural del cuerpo”, explica el profesor Thomas Münzel, del Centro Médico Universitario de Mainz, en Alemania, y autor de trabajo.
La contaminación del aire, el agua y el suelo es responsable de al menos nueve millones de fallecimientos cada año. Más del 60% de las enfermedades y las muertes relacionadas con ella se deben a patologías cardiovasculares, como cardiopatía isquémica crónica, infarto de miocardio, accidente cerebrovascular y trastornos del ritmo cardiaco (arritmias).
Este documento de revisión destaca los vínculos entre la contaminación del suelo y la salud humana, con un enfoque particular en las enfermedades cardiovasculares. Los contaminantes del suelo incluyen metales pesados, pesticidas y plásticos. En este sentido, los autores afirman que el suelo contaminado puede provocar enfermedades cardiovasculares al aumentar el estrés oxidativo en los vasos sanguíneos (con más radicales libres malos y menos antioxidantes buenos), al causar inflamación y al alterar el reloj biológico (ritmo circadiano).
Riesgos de la contaminación del suelo y el agua
La tierra sucia puede ingresar al cuerpo al inhalar polvo del desierto, cristales de fertilizante o partículas de plástico. Metales pesados como el cadmio y el plomo, los plásticos y los tóxicos orgánicos (por ejemplo, los contenidos en pesticidas) también se pueden consumir por vía oral. Los contaminantes del suelo llegan a los ríos y crean agua sucia que puede consumirse.

A este respecto, desde la ESC se recuerda que los pesticidas se han relacionado con un riesgo elevado de enfermedad cardiovascular. Si bien los empleados de las industrias agrícola y química enfrentan la mayor exposición, la población general puede ingerir pesticidas a través de alimentos, suelos y agua contaminados.
Mientras, el cadmio es un metal pesado que se encuentra naturalmente en pequeñas cantidades en el aire, el agua, el suelo y los alimentos, y también proviene de fuentes industriales y agrícolas. El documento recoge que los estudios de población han mostrado resultados mixtos sobre la relación entre el cadmio y las enfermedades cardiovasculares, y cita un estudio coreano que muestra que los ciudadanos de mediana edad con niveles elevados de cadmio en la sangre tenían riesgos elevados de accidente cerebrovascular e hipertensión.
Respecto al plomo, desde la Sociedad Europea de Cardiología se explica que es un metal tóxico de origen natural que contamina el medio ambiente a través de la minería, la fundición, la fabricación y el reciclaje. Los estudios analizados en este trabajo han encontrado asociaciones entre los niveles altos de plomo en la sangre y las enfermedades cardiovasculares, incluidas las patologías coronarias, los infartos y los accidentes cerebrovasculares, en mujeres y personas con diabetes. Otras investigaciones han apuntado a un mayor riesgo de muerte por enfermedad cardiovascular asociada con la exposición al arsénico, un metaloide natural cuyos niveles pueden aumentar debido a los procesos industriales y al uso de agua contaminada para regar los cultivos.
Un problema global
En este escenario, los autores del estudio publicado en Cardiovascular Research afirman: “Si bien la contaminación del suelo con metales pesados y su asociación con enfermedades cardiovasculares afecta especialmente en los países de bajos y medianos ingresos, ya que sus poblaciones están desproporcionadamente expuestas a estos contaminantes ambientales, se convierte en un problema para cualquier país del mundo debido a la creciente globalización de las cadenas de suministro de alimentos y la absorción de estos metales pesados en frutas, verduras y carne”.

En este sentido, el documento hace referencia a los peligros potenciales del polvo contaminado en el aire, que puede viajar largas distancias. Sobre esto, la investigación señala que las partículas del suelo en China y Mongolia se relacionaron con mayores probabilidades de eventos cardiacos en Japón, donde el número de visitas a los servicios de emergencias cardiovasculares fue un 21 % más alto en los días de fuerte exposición al polvo asiático.
Por último, si bien no hay estudios de población sobre los efectos en la salud cardiovascular de los nano y microplásticos en humanos, la investigación ha mostrado que estas partículas pueden llegar al torrente sanguíneo, lo que hace posible que puedan viajar a los órganos y causar inflamación sistémica y enfermedades cardiometabólicas.
“Se necesitan más estudios sobre el efecto combinado de múltiples contaminantes del suelo en las enfermedades cardiovasculares, ya que rara vez estamos expuestos a un solo agente tóxico. Se requiere con urgencia investigar sobre cómo los nanoplásticos y los microplásticos podrían iniciar y exacerbar las enfermedades cardiovasculares. Hasta que sepamos más, parece sensato usar una máscara facial para limitar la exposición al polvo arrastrado por el viento, filtrar el agua para eliminar los contaminantes y comprar alimentos cultivados en un suelo saludable”, defiende el profesor Thomas Münzel.
Referencia:
Münzel T, Hahad O, Daiber A, Landrigan PJ. ‘Contaminación de suelos y aguas y salud humana: ¿de qué deben preocuparse los cardiólogos?’ Cardiovascular Res . 2022. doi:10.1093/cvr/cvac082.
Fuente: Sociedad Europea de Cardiología
Recordamos que SALUD A DIARIO es un medio de comunicación que difunde información de carácter general relacionada con distintos ámbitos sociosanitarios, por lo que NO RESPONDEMOS a consultas concretas sobre casos médicos o asistenciales particulares. Las noticias que publicamos no sustituyen a la información, el diagnóstico y/o tratamiento o a las recomendaciones QUE DEBE FACILITAR UN PROFESIONAL SANITARIO ante una situación asistencial determinada.
SALUD A DIARIO se reserva el derecho de no publicar o de suprimir todos aquellos comentarios contrarios a las leyes españolas o que resulten injuriantes, así como los que vulneren el respeto a la dignidad de la persona o sean discriminatorios. No se publicarán datos de contacto privados ni serán aprobados comentarios que contengan 'spam', mensajes publicitarios o enlaces incluidos por el autor con intención comercial.
En cualquier caso, SALUD A DIARIO no se hace responsable de las opiniones vertidas por los usuarios a través de los canales de participación establecidos, y se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso cualquier contenido generado en los espacios de participación que considere fuera de tema o inapropiados para su publicación.
* Campos obligatorios